Última actualización: 16 de Febrero de 2024
Autor: Francisco Giménez
Además del aprovechamiento de la energía solar para la producción de electricidad de autoconsumo en viviendas, industrias y medios de transporte, podemos beneficiarnos de la aerotermia para aclimatar nuestro hogar y conseguir agua caliente todo el año. Estas dos formas de energía combinadas nos permitirán ahorrar en las facturas de luz y gas, generando nuestra propia energía limpia y sostenible de forma muy eficiente.
Hoy te hablamos de la aerotermia, una fuente de energía que puede usarse todo el año para mantener una temperatura ideal en casa de forma muy rentable.
La aerotermia es uno de los modelos energéticos más eficientes en la actualidad que permite usar un recurso natural como el propio aire para producir energía de autoconsumo, mediante el uso de un sistema que ocupa poco espacio y que no requiere de mucho mantenimiento.
Este sistema se compone principalmente de una bomba de calor reversible, que actúa enfriando el aire caliente en verano y calentando el aire frío en invierno, con lo que conseguiremos una climatización perfecta en nuestra vivienda. Esta quizás sea su principal ventaja, ya que podremos obtener desde un mismo equipo tanto calefacción como refrigeración, según la época del año.
En una bomba de calor de los sistemas de aerotermia, el funcionamiento es el siguiente: la energía ambiental del exterior se capta y circula a través de un circuito de gas refrigerante, convirtiéndola en vapor. El compresor se encarga, como su propio nombre indica, de comprimir este refrigerante gaseoso, transfiriendo el calor sobrante al sistema de calefacción de la vivienda, o al depósito de agua caliente, según el caso.
Después de este proceso el refrigerante vuelve a enfriarse, convirtiéndose en líquido, para luego salir pulverizado a través de la válvula de expansión. De esta forma se vuelve a iniciar el ciclo, ya que el circuito refrigerante queda listo para volver a realizar su labor.
Además de climatizar, la aerotermia se utiliza también para conseguir agua caliente sanitaria, que se puede almacenar en un acumulador al igual que sucede con los habituales termos eléctricos, pero permitiéndonos un mayor ahorro en nuestra factura. Y de la misma forma que este sistema permite generar agua caliente para nuestros baños y duchas, también podremos calentar radiadores o sistemas de suelo radiante, sin generar ruido ni humos y a cambio de un muy bajo consumo.
Si bien el precio de una instalación de aerotermia combinado con placas solares será más elevado que el coste por un sistema de climatización convencional, debemos tener en cuenta la rentabilidad a largo plazo y el ahorro que conseguiremos cada mes gracias a la aerotermia y el autoconsumo solar.
El coste de este modelo híbrido, como suele suceder en estos casos, dependerá de varios factores. El uso que hagamos de la aerotermia es uno de ellos, ya que no es lo mismo emplear la instalación para solo calefacción o solo agua caliente que usarla para cubrir ambas necesidades a la vez.
Debemos tener en cuenta también el tamaño del inmueble, puesto que cuanto mayor sea, más metros de suelo radiante habrá que cubrir si usamos la aerotermia para la climatización de la vivienda. También necesitaremos una instalación hidráulica de mayor tamaño y una mayor potencia en la bomba de calor, algo que hará que el coste final se incremente.
Si queremos hacer una estimación de costes, podemos situar el precio de una bomba de aerotermia a partir de los 6.000 euros. A este precio habría que sumarle los costes derivados del montaje y la instalación del sistema, además de las conexiones eléctricas indispensables, que podríamos establecer en unos 1.500 o 2.000 euros.
A la inversión necesaria para nuestro sistema de aerotermia, tendríamos que añadir el coste de nuestra instalación fotovoltaica, en caso de querer beneficiarnos del autoconsumo generado en nuestras propias placas solares. Este coste dependerá de la misma forma de las dimensiones de la instalación, o del número y tipo de placas utilizadas.
No obstante, no debemos olvidar que existen ayudas y subvenciones a nivel europeo, como los fondos Next Generation, gestionados a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España. Mediante estos incentivos podremos abaratar costes y reducir la inversión necesaria en este modelo híbrido incluso hasta un 50%.
Recurrir a la aerotermia en nuestra vivienda o negocio puede ser una solución que nos permita disfrutar de todo el confort que buscamos, obteniendo una temperatura ideal en cualquier época del año, además de agua caliente cuando la necesitemos.
Se trata de un sistema muy rentable y fácil de amortizar, puesto que su rendimiento se estima en un 400%. Esto quiere decir que por cada kilovatio que pueda consumir este sistema para funcionar, nos proporcionará una energía equivalente a 4 kilovatios, cuatro veces mayor.
Pero todavía podemos aumentar la rentabilidad de este sistema si lo combinamos con el uso de placas solares, con las que poder obtener la electricidad necesaria para su funcionamiento. Así conseguimos sacar todo el provecho a uno de los sistemas híbridos más eficientes del mercado energético, que además nos proporciona energía 100% renovable y sin emisiones.
No debemos olvidar que para instalar este tipo de sistemas, tanto si hablamos de aerotermia como de placas fotovoltaicas, será necesario cumplir con la normativa vigente y realizar todos los trámites obligatorios para contar con una instalación totalmente legal.
¿Cuántas placas solares necesitas?
Preguntas Frecuentes sobre Aerotermia con Placas Solares
Otra opción con la que podemos aprovechar todavía más nuestra instalación de autoconsumo y el sistema de aerotermia asociado es mediante el uso de baterías, con las que podremos almacenar los excedentes de energía generados. Esos excedentes podrán usarse luego en la climatización de nuestra vivienda, incluso en aquellas horas en las que no contamos con radiación solar, como por ejemplo durante la noche o en esos días de invierno en los que no luce el sol tanto como nos gustaría. En definitiva, a implementación de baterías y el almacenamiento de los excedentes energéticos nos permite hacer uso de nuestro sistema de aerotermia sin necesidad de recurrir a la red eléctrica.
La aerotermia es un recurso excelente también durante los meses más calurosos del año puesto que nos permite mantener una temperatura ideal en nuestra vivienda, de forma sostenible, silenciosa y sin incómodas corrientes de aire frío. Para conseguir bajar la temperatura del aire y aclimatar una vivienda u oficina, los sistemas de aerotermia utilizan un ventilador con el que aspiran el aire caliente y lo refrigeran en un circuito cerrado. Al realizar este proceso, el refrigerante sube de temperatura y con ello, la presión del compresor del equipo aerotérmico. Para enfriarse de nuevo, el refrigerante sale hacia el intercambiador de calor, el calor se libera al exterior, y el aire ya enfriado es impulsado desde el ventilador hacia el interior atravesando los conductos de ventilación. Cumplida esta función, el refrigerante vuelve al intercambiador para absorber calor de nuevo y repetir este ciclo.
Escrito por
Francisco Giménez
Director de operaciones de Ensoval Renovables
Licenciado en Ciencias Ambientales y técnico superior en eficiencia energética y energía solar. Profesional con más de 10 años de experiencia en el sector de las energías renovables.