Última actualización: 09/02/2024
Autor: Gabriel Sola
Si estás pensando en instalar placas solares, probablemente te estés preguntando qué tipos de soportes existen y por cuál decantarte. Para ayudarte a resolver estas dudas, te contamos qué son exactamente los soportes solares, qué variantes existen y qué tener en cuenta a la hora de elegir el mejor tipo de soporte.
De todos modos, recuerda que en Placas Solares somos expertos en la instalación de este tipo de soportes. Por eso, si tienes alguna duda o estás buscando a profesionales capacitados para llevar a cabo un trabajo de calidad, no dudes en contactar con nosotros sin compromiso. ¡Te estamos esperando!
Tabla de contenidos
Los soportes solares, también conocidos como estructuras, son aquellos elementos que determinan la orientación de los paneles y proporcionan seguridad y firmeza en nuestro sistema de autoconsumo. Para otorgar dicha sujeción a los paneles y determinar cuál es la mejor disposición, habrá que tener en cuenta el número de placas, la potencia de las mismas y el lugar en el que se van a instalar. El objetivo último de este entramado será explotar al máximo la radiación solar.
Existen paneles solares de varios tipos, pero todos tienen en común que están fabricados con materiales altamente resistentes, ya que deben permanecer durante años bajo las inclemencias del tiempo. Algunos de los materiales más utilizados son los de acero, tanto galvanizado como inoxidable, los de aluminio y los de hormigón. En ocasiones, dichos soportes vienen como añadidos en los kits y, en otros casos, será necesario comprarlos por separado.
Existen distintos tipos de soportes para paneles solares, los cuales varían según aspectos tales como las características de su estructura y su ubicación. La inclinación es un factor determinante, pudiendo ser regulable o de 30º o 60º. El lugar de la instalación también es determinante, dependiendo de si se trata de una cubierta inclinada o plana, si es móvil o no, si es una marquesina o si estamos hablando de una fachada.
Los tejados de tejas a dos aguas necesitan un tipo de soporte específico, que puede ser coplanar o de otro tipo. En el primer caso, son soportes sencillos que no poseen demasiado impacto visual, además de resultar extremadamente prácticos. En el segundo, se trata de estructuras diseñadas para casos específicos, como para tejados tipo sándwich y huertos solares.
En tejados sin inclinación con cubiertas planas o, incluso, sobre cualquier otra superficie recta, se utilizan otro tipo de soportes, cuya principal diferencia los divide en dos grandes bloques: soportes con estructura triangular e inclinada y soportes individuales. Los soportes triangulares son estructuras verticales que se sitúan sobre tejados o terrazas planas. Ofrecen una gran capacidad y, además, también son más económicos que los soportes individuales. Estos últimos se colocan en horizontal y deben soportar una cantidad de paneles solares reducida.
A diferencia de los dos tipos de soportes anteriores, estos pueden rotar para seguir los movimientos del sol. En este sentido, son el tipo de estructura más avanzada que hay en el mercado. A pesar de que su funcionamiento reviste una mayor complejidad, también es cierto que su eficiencia es mayor, incrementando la producción total de energía fotovoltaica en un 15-40%.
El funcionamiento de estos paneles exige una mayor demanda de electricidad para que puedan funcionar de manera autónoma, así como las labores de mantenimiento también suelen ser más frecuentes.
Son aquellos tipos de soportes que se utilizan en lugares como, por ejemplo el parking de un centro comercial, la entrada de un edificio o el porche de una casa, cuya función es proteger las entradas y aprovechar, a su vez, para producir energía. En este caso, las formas y tamaños son muy variadas, así como su capacidad, por lo que es fácil encontrar uno que se ajuste a lo que estamos buscando.
Cuando las cubiertas no permiten la instalación de placas solares, podemos optar por instalarlas en una fachada o vertical. Para ello, es preciso utilizar un tipo de soportes particulares, típicamente fabricados en acero o aluminio, perfectamente preparados para soportar todo tipo de climatologías.
Otra de las principales características a tener en cuenta a la hora de seleccionar los soportes para placas solares más apropiados es el material con el que están fabricados. Entre los más frecuentes nos encontramos los de aluminio, los de acero (inoxidable y galvanizado) y los de hormigón.
A la hora de elegir tus placas solares, tienes que tener en cuenta una serie de elementos que van en relación con lo expuesto más arriba y que se pueden resumir de la siguiente manera:
Con todo, cabe tener en cuenta que, respecto a la orientación, lo ideal es que las placas se encuentren mirando al sur para poder sacarle el máximo partido, pero este tipo de instalaciones suelen tolerar hasta 45º de desviación sin apenas perder eficiencia.
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